TODO ES UNA FARSA......
Es una farsa la guerra contra los cultivos de coca,..... la erradicación
forzada es una estrategia diseñada solo para las zonas y territorios previamente
ocupados por las FARC, y en los que los campesinos se resisten a la presencia y
control de sus cultivos por parte de los grupos paramilitares (socios del
narcoestado).
Son una farsa los programas de erradicación voluntaria y de sustitución
de los cultivos de uso ilícito.... El interés del narcoestado (siguiendo
instrucciones de Washington) no es la eliminación de los cultivos sino el
control total del negocio del narcotráfico, y si los campesinos cultivadores de
coca no se someten a la autoridad de los nuevos patrones, los paramilitares, seguirán
siendo masacrados, como quedó demostrado con la masacre cometida hace apenas tres
semanas en la zona del Alto Mira, municipio de Tumaco, donde previamente
operaban las guerrillas de las FARC, quienes no solo controlaban las áreas de
cultivos y el comercio local, sino que aseguraban que los campesinos recibieran un
precio justo por kilo de hoja de coca.
Son una farsa las alertas, preocupaciones y amenazas de Trump de descertificación
al gobierno de Santos por el incremento de los cultivos de coca en el
país......La guerra contra las drogas del gobierno de EEUU no fue diseñada para
acabar con el negocio del narcotráfico que contribuye con billones de dólares a
su economía, sino para eliminar a competidores del negocio, incluidos gobiernos
que no son afines a sus políticas militaristas e imperialistas. En Colombia, su
"guerra contra las drogas" es además el pretexto para mantener la militarización
y el control de la economía y en general de toda la política del país.
Es una farsa la guerra contra las drogas del gobierno de
EEUU,.....como ha sido demostrado en varias ocasiones; la mas reciente con
ocasión de su guerra contra Afganistán, donde luego de la invasión de 2001, los
narcotraficantes (que previamente habían sido desterrados por el gobierno de
los Talibanes), no solo retornaron al negocio del cultivo y narcotráfico de
opio y heroína, sino que el gobierno invasor gringo les aseguró cargos
importantes en el gobierno y docenas curules en el parlamento Afgano. No
olvidar tampoco la inundación de las calles de EEUU con las miles de toneladas
de cocaína que a los Contras de Nicaragua les fue permitido transportar y vender
en ese país.
Son una farsa las peleas personales y diferencias políticas entre
Santos, el narcoparauribismo, y ahora dizque con el VargasLlerismo.....Los
protagonistas de esta novela (trágica para el país) además de ladrones y
criminales son unos excelentes actores y
serviles/testaferros ejemplares del gobierno de EEUU. Todo ha salido según
lo planeado, Santos culminará pronto su segundo periodo presidencial, y su
seguro sucesor será el candidato que surja del contubernio entre Vargas Lleras
y el narcoparauribismo.
Es una farsa el acuerdo de paz, el cuento de que harán trizas los
acuerdos de paz es literalmente real; de hecho ya lo empezó a hacer trizas el
propio Santos, y bajo el escenario político descrito en el párrafo anterior, de
ese acuerdo de paz si acaso quedará como recuerdo la presencia de 10 ex
guerrilleros en el congreso de la republica (si es que no los asesinan antes de
las elecciones), y que tendrán una representación decorativa pues en la próximas
elecciones la mayoría de curules tanto en la Cámara como en el Senado pasará a
manos de la coalición entre el VargasLlerismo y el narcoparauribismo. Bajo ese arreglo politiquero, cualquier
propuesta de reforma social, política o económica que propongan los 10 congresistas
ex guerrilleros será literalmente aplastada, no tendrá ninguna repercusión, seguramente
no será ni siquiera discutida al interior del congreso. Para no mencionar que
los otros partidos mal llamados de oposición, el Polo Democrático y los Verdes,
también perderán representación en el congreso en las próximas elecciones.