Nos equivocamos quienes pensamos que la cadena de denuncias e investigaciones, e incluso condenas de sus mas cercanos secuaces, por todos las acciones criminales y de corrupción ocurridas durante los 8 anos de mandato del narcoparauribismo, iban a acallar o mantener ocupado defendiéndose al expresidente Uribe.
La gran noticia de comienzo de año es que el expresidente y sus secuaces mas cercanos continúan mas activos que nunca, es mas con mucho mas ímpetus, y sus proyecto político criminal esta siendo relanzado bajo la sombrilla del seudo centro de pensamiento “Primero Colombia”, fundado por el narcoparauribismo y dirigido por el montesinos José Obdulio Gaviria.
El relanzamiento del proyecto criminal narcoparauribista incluye por el momento la retoma política del país entero mediante el adoctrinamiento de todos los posibles candidatos a gobernaciones y alcaldías, y la escogencia misma de los candidatos a las próximas elecciones regionales y locales, no solo en representación del narcoparauribismo/conservatismo sino de otros grupos políticos, pues la consigna político-electoral es “o estan con nosotros o en contra de nosotros”. Todo este proceso de adoctrinamiento lo están desarrollando bajo el eufemismo de “talleres programaticos”.
Uno de los objetivos de estos talleres es por supuesto la identificación y escogencia de los candidatos mas leales y serviles al narcoparauribismo, para lo cual buscan reagrupar/unificar las fuerzas políticas regionales y locales alrededor de personajes que ya de antemano han seleccionado, y que en la mayoría de los casos son ex funcionarios cercanos del régimen narcoparauribista.
El otro gran objetivo es hacer creer que a traves de los talleres se identificaran los problemas mas prioritarios de cada región y con base en ese ejercicio se definirán las plataformas políticas y programáticas de los candidatos seleccionados. Es obvio por supuesto que esa plataforma programática no es nada distinto que el reforzamiento de la “seguridad democrática”; léase, la continuación de las políticas del terrorismo estatal bajo el cual el narcoparauribismo se tomo el país desde el 2002.
Lo tenebroso de este proyecto es que cuenta con el apoyo del gobierno gringo (mas abiertamente, del partido republicano, hoy mayoría); incluso se podría decir que nace de su propia iniciativa, pues bajo un proyecto narcoparauribista ven mas garantías para la recuperación y reposicionamiento imperial en la región, lo cual bajo el gobierno de Santos, dado su giro en cuanto las relaciones con los gobiernos de izquierda de la región, no lo ven tan inminente. Para la derecha gringa especialmente, no hay duda de que el expresidente Uribe es quien mas les sirve a sus propósitos pues al brindarle protección contra su prontuario criminal lo pueden manejar a su antojo. Una primera señal de esta protección será la aprobación de la inmunidad que esta solicitando Uribe como blindaje contra citaciones a declarar en procesos que se siguen en Estados Unidos por casos de asesinatos de civiles y lideres sindicales.
Para el estamento político y corporativo gringo es claro que el escenario actual no es el mas favorable para adelantar acciones directas de intervención militar en la región. El tener que congelar por cuatro anos su proyecto guerrerista en la región implica que durante este periodo tienen que crear las mejores condiciones para en las próximas elecciones presidenciales propiciar la designación de un presidente incondicionalmente servil a sus intereses como lo fue Uribe. Este escenario no lo pueden garantizar sin la retoma regional y local por parte del narcoparauribismo.
En el entre tanto, lo que en la realidad se sentirá en el país es un gobierno paralelo, así en la formalidad se aparente que hay unidad alrededor de Santos y apoyo a sus políticas de gobierno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario